PENSILVANIA.- La frase popular «misuegra me mata», se hizo realidad en Pensilvania, cuando un hombre murió aplastado por la lápida de la madre de su esposa.
Un hombre, que atendía la tumba de su suegra junto a su mujer el pasado 30 de marzo, falleció cuando lo aplastó la lápida al arrodillarse ante la misma.
Ésta, seguramente, pasa a formar parte de una de las muertes más insólitas del mundo. No todos los días una suegra se desquita del marido de su hija desde el más allá.
La familia del hombre no encuentra consuelo al enterrar a dos parientes el mismo día.