Cuando los médicos le dijeron que no podían hacer nada más por él, tomó la decisión de donar todos sus órganos para que fueran aprovechados por aquellos que los necesitaran.
Reverenciando su cuerpo, así se despidió todo el equipo médico de Liang Yaoyi, un niño chino de 11 años que falleció y donó la mayoría de sus órganos a otros niños que los necesitaban, un gesto que emocionó a los doctores y enfermeras.
A pesar de que fue tomada meses atrás, la poderosa imagen ha sido noticia esta semana tras ser publicada por el Daily China. Lianhg Yaoyi, un niño de Shenzhen (China), que murió a causa de un cáncer en el cerebro que le fue detectado dos años atrás. A pesar de que su enfermedad le impidió asistir a clase con regularidad, el niño era uno de los alumnos más destacados de su curso.
Cuando los médicos le dijeron que no podían hacer nada más por él, tomó la decisión de donar todos sus órganos para que fueran aprovechados por aquellos que los necesitaran. Así, nada más fallecer, fue llevado a quirófano para que le extrajeran el hígado y los riñones.
Según explica su madre, en declaraciones que recoge el medio británico Mirror, el pequeño explicó que donar los órganos “era otra forma de seguir vivo”. Además, su progenitora revela que Liang le dijo “Hay mucha gente haciendo cosas extraordinarias en el mundo. Yo también quiero hacer algo bueno, y también quiero ser un buen chico”.