Recibimos una llamada de una señora que conducía cuando vio un cachorrito escondido en los autobuses, sangre en el camino presumiblemente de su madre (de ninguna manera plantamos su cuerpo) y muchas medidas debajo de un cachorrito muerto de la misma edad, presumiblemente ella familia.
Cuando llegamos vimos una zona realmente peligrosa, una carretera principal, sin casas cerca y campos interminables. Buscaremos cada centímetro si finalmente podemos ayudarte.
Allí se escondió, palpitando de miedo. Bebé de pocos meses. Lo llevamos incontinente, estaba enfermo y muy delgado. Vamos al veterinario. Angelito, sí lo llamamos Ángel, tenía problemas en la piel, diarrea y náuseas. Estuvo muchos días en el sanatorio y cuando se sintió mejor lo llevamos a nuestro cuidado.
Aproximadamente una semana después, Ángel se enfermó nuevamente y tuvo que regresar al sanatorio. Estábamos tan histéricos por su vida, pero este lindo chico es un luchador y ha mejorado.
Estaba listo para salir del sanatorio y tuvimos la suerte de encontrar un hijo adoptivo. La mayoría de las veces no tenemos tanta suerte. Ángel se quedó con una familia de acogida durante unos meses hasta que estuvo lo suficientemente bien como para encontrar una familia.
¡Llegó ese terrible día y Ángel nos dejó por una vida mejor! No podríamos estar más felices por él. Su familia lo ama!!!!