Chupete, el cachorro que nadie quiere adoptar por el tamaño de su cabeza
Chupete es un cachorro nacido en Bolivia, necesita urgentemente encontrar un hogar, pero desde que aparecieron las primeras publicaciones en adopción, el perro ha sido troleado en las redes sociales.
El motivo de las bromas y comentarios crueles es la aparición del peludo. Chupete nació con hidrocefalia, una condición que aumenta el volumen del cráneo. En otras palabras, Chupete es un perro «con cabeza». También nació con un estrabismo pronunciado.
La historia
Claudia Patricia es activista por los derechos de los animales y vive en Cochabamba, una de las ciudades más grandes de Bolivia y una de las más altas del mundo: Está ubicada en un valle de los Andes a 2.560 metros.
La activista fue la encargada de difundir la historia de Chupete en las redes sociales. Publicando fotos y mensajes de texto en Instagram y Facebook, trató de encontrar una familia humana dispuesta a llevarse al cachorro a casa.
Desde entonces, el perro se ha convertido en el objetivo de muchos internautas. La foto de Chupete se convirtió en un meme y se compartió la mayor parte del tiempo sin una solicitud de adopción, solo como pasatiempo y diversión.
Chupete nació en Refúgio Gamaliel pero actualmente vive en el albergue Narices Frías (Narices Frías) en el centro de Cochabamba. Claudia se compromete a encontrar un hogar para el perro, así como recursos para la atención veterinaria. A pesar del troleo, la activista está decidida a encontrarle un hogar al peludo.
De hecho, Chupete, el perro cabezón, como le llamaban, puede considerarse una auténtica maravilla. Con hidrocefalia, las posibilidades de supervivencia eran escasas, pero el pequeño perro se defendió con valentía.
En una nueva publicación, Claudia escribió: «Un chupete es un milagro. Tiene seis semanas y ya come. No creo que haya nacido, de hecho el veterinario nos dijo que nació muerto por la enfermedad y la hidrocefalia, tiene una ligera desviación en los ojos pero le da un aire de ternura”.
A pesar de los comentarios sesgados, Pacifier se estaba extendiendo como la pólvora en las redes sociales, lo que podría aumentar las posibilidades de adopción. Claudia insiste en que el perro «es un milagro y la familia que lo adopte recibirá un regalo».
La campaña de adopción de Pacifier está en pleno apogeo. El cachorro supera todas las limitaciones impuestas por la hidrocefalia y ya no corre riesgo de morir, según los médicos. Además de los chistes y bromas, muchos internautas han expresado su interés en conservar el pelaje en casa.
La enfermedad
La hidrocefalia canina es una enfermedad congénita. Es la acumulación de líquido cefalorraquídeo en los ventrículos del cerebro provocada por la obstrucción del flujo. La enfermedad se manifiesta por signos clínicos de encefalopatía, término utilizado para cualquier enfermedad que altera la estructura y función del cerebro.
Los síntomas de la enfermedad son evidentes, especialmente en la forma congénita:
- cabeza hinchada;
- irregularidades y deformaciones en el cráneo;
- marcha desigual y temblorosa;
- discapacidad visual y auditiva;
- convulsiones
Sin embargo, estos signos pueden indicar una serie de otras condiciones de salud. Para confirmar el diagnóstico, el veterinario debe revisar imágenes de rayos X y ultrasonido del cráneo y del sistema nervioso central.
La hidrocefalia canina necesita tratamiento, pero todo depende de la gravedad del caso. Se manifiesta fácilmente (como ocurre con los chupetes) y se puede controlar con medicación hasta eliminar por completo el líquido acumulado. En casos más severos, se requiere cirugía y tubos de drenaje.